Conjunctivitis
Conjuntivitis
We are excited to announce that our website is actively engaged in the development of a standardized patient education document on the topic of Conjunctivitis.
While this project is underway, we have found high-quality patient education materials that meet our standards for evidence-based content. We appreciate your patience and encourage you to explore the available materials as we strive to enhance our commitment to delivering quality information to our users.
Nos complace anunciar que nuestro sitio web está trabajando activamente en la creación de un documento de educación estandarizada para pacientes sobre el tema de Conjuntivitis.
Mientras este proyecto está en marcha, tengan la seguridad de que hemos puesto a disposición recursos que cumplen con nuestros rigurosos estándares de contenido basado en evidencia. Agradecemos su paciencia y los animamos a explorar los materiales disponibles mientras nos esforzamos por mejorar nuestro compromiso de proporcionar información de calidad a nuestros usuarios.
Conjunctivitis
Conjunctivitis, commonly known as pink eye, is an inflammation of the conjunctiva, the thin transparent membrane that covers the white part of the eye and lines the inner surface of the eyelids.
This condition can be caused by viral or bacterial infections, allergies, or irritants.
Symptoms include redness, itching, tearing, and a gritty sensation in the eyes.
Depending on the cause, conjunctivitis may be highly contagious, especially in cases caused by viruses or bacteria.
While viral conjunctivitis tends to resolve on its own, bacterial conjunctivitis may require antibiotic treatment. Allergic conjunctivitis is often managed by avoiding allergens and using antihistamine eye drops.
Maintaining good hygiene practices, such as frequent handwashing and avoiding eye rubbing, can help prevent the spread of conjunctivitis.
Conjuntivitis
La conjuntivitis, comúnmente conocida como ojo rosado, es una inflamación de la conjuntiva, la fina membrana transparente que cubre la parte blanca del ojo y reviste la superficie interna de los párpados.
Esta condición puede ser causada por infecciones virales o bacterianas, alergias o irritantes.
Los síntomas incluyen enrojecimiento, picazón, lagrimeo y una sensación arenosa en los ojos.
Dependiendo de la causa, la conjuntivitis puede ser altamente contagiosa, especialmente en casos causados por virus o bacterias.
Mientras que la conjuntivitis viral tiende a resolverse por sí sola, la conjuntivitis bacteriana puede requerir tratamiento con antibióticos. La conjuntivitis alérgica se maneja generalmente evitando alérgenos y usando gotas para los ojos con antihistamínicos.
Mantener buenas prácticas de higiene, como lavado frecuente de manos y evitar frotarse los ojos, puede ayudar a prevenir la propagación de la conjuntivitis.